Las baterías de ciclo profundo están diseñadas para soportar descargas y recargas lentas y graduales a lo largo de períodos extensos. Este tipo de baterías es ideal para vehículos recreativos (RV), así como para unidades de almacenamiento de energía solar y fuentes de alimentación ininterrumpida, ya que las placas gruesas de las baterías de ciclo profundo están diseñadas para resistir descargas repetidas. Por el contrario, las baterías de arranque destacan en proporcionar ráfagas cortas de potencia de alta calidad necesarias para encender motores. Dichas baterías utilizan placas delgadas que permiten la liberación rápida de energía, pero no pueden soportar descargas profundas. Conocer las diferencias, como la construcción de cada batería, es vital para determinar cómo elegir una batería para una aplicación específica.